Tú, ¿qué crees?

Los que respondieron cualquier cosa que tenga que ver con la gravedad, su peso, etc. están en lo correcto.

Los que respondieron que cayó porque abrí la mano y la solté, también están en lo cierto.

Estamos frente a dos verdades, una que te vaticina una vida llena rencor y resentimiento. Y otra que te abrirá la puerta a la felicidad.

 La gravedad, va a estar siempre ahí. Y hoy la gravedad puede ser “llegué tarde por el transito”, el vaso se cayó, el archivo se perdió.

En cambio, poner el foco en mi, es hacerme cargo que llegué tarde, porque salí tarde. Es hacerme cargo que tiré el vaso, o que me olvidé de enviar un archivo.

Un primer ejercicio para empezar a ser protagonista de nuestras vidas, es hablar en primera persona. Estamos acostumbrados a perdernos en las generalización del: todos, ninguno, deberíamos, alguien o en el otro extremo la  simplificación de “Uno”. Por que uno esta cansado de que lo pillen, uno no sabe que hacer… Y quién es Uno?????

Yo estoy cansada de meter la pata, Yo digo lo que pienso.

Los desafío a que se escuchen y escuchen a los otros… Y simplemente observen…

Y a los osados… pongan en práctica el poder, de hacerse responsables de lo que dicen.  En primera persona.

Te animás?

Comparte qué ha cambiado al usar la primera persona.

Seguimos conversando.